Hay 10 millones de kilos de peras, frenados en Mendoza.
Tras la auditoria técnica que Brasil realizó esta semana a la provincia, en la que se revisaron diferentes aspectos del Sistema de Mitigación de Riesgo (SMR) puesto en marcha por ambos países, los empacadores de peras y manzanas de la provincia están a la espera de que se destrabe el conflicto y más de 10 millones de kilos de frutas de pepita puedan ser enviados a ese destino.
Es que la conmoción que significó para la agroindustria local la suspensión temporal de la importación de manzana, pera y membrillo por la detección de cargamentos con carpocapsa (Cydia pomonella) en marzo último por parte de Brasil, puede generar la pérdida de más de 2.000 puestos de trabajo en la industria local para la próxima temporada.
Juan Riveira, empacador y presidente de la Asociación de Productores y Exportadores de Fruta en Fresco (Aspeff), estimó: “Si tenemos en cuenta los puestos fijos de trabajo para pera y manzana, analizando tanto la industria como la parte productiva, podemos hablar de que más de 2.000 puestos de trabajo están en riesgo si no se encuentra una solución”. Para el empresario, la situación es crítica y los plazos se acortan.
“Necesitamos empezar a enviar fruta durante los próximos 30 días, para poder colocarla dentro del ciclo comercial. Si no encontramos respuesta, más de 500 mil cajas, que significan unos 10 millones de kilos, se perderán”, dijo al tiempo que agregó que “el mercado interno está sobresaturado. Ya no sólo hablamos que colocar esa fruta acá generará un perjuicio en los precios. La demanda de pera en el mercado interno no existe, por lo que aún con precios bajos la fruta no se va a poder colocar”.
Alberto Carleti, presidente de la Cámara de Comercio de Tunuyán y miembro de la Mesa frutícola provincial, coincidió en el análisis.
“Si tenemos en cuenta el ciclo comercial de pera, especialmente, porque la manzana aguanta bien empacada un poco más, tenemos como máximo 30 días para colocar el producto en el mercado», aseguró Carleti.
Al margen del perjuicio económico para empacadores, lo cierto es que los productores también están atravesando por un momento complejo ya que la cadena de pagos se cortó.
En este sentido, Carleti sostuvo que “hoy los plazos de pago propuestos al productor están totalmente paralizados. Además en el caso de la industria, los empacadores también adelantaron dinero para la cosecha a los productores que ahora no pueden recuperar porque no pueden vender el producto”.
Para Mendoza, Brasil es el principal destino para los envíos de fruta en fresco, por lo que cualquier cambio en las reglas comerciales afecta los resultados de las empresas agroindustriales locales.
En 2014 las exportaciones de manzanas mendocinas sumaron 1,3 millón de kilos lo que significó ingresos por 1,1 millón de dólares FOB, de los cuales 1,06 millón terminó en Brasil.
En tanto, para el caso de la pera, de los 10,5 millones de kilos de pera que exportó la provincia, 9,9 millones de kilos fueron enviados a Brasil, lo que supuso ventas por 9,5 millones de dólares FOB, según datos oficiales provistos por Pro Mendoza.
La recepción oficial
La comitiva que llegó desde Brasil, primero arribó a la provincia, donde visitaron empaques y fincas. En tanto, desde ayer y hasta el viernes se encuentran en la zona del Alto Valle, una de las regiones productoras más importantes del país.
Datos del INTA indican que para las provincias de Río Negro y Neuquén (Alto Valle), la manzana y pera representa el 71,2% de la superficie cultivada del país con 53.500 hectáreas, así como el 84,7% de la producción y el 95% de las exportaciones en fresco e industriales. Mientras, en Mendoza, este cultivo logra 4.259 hectáreas para la pera y 3.017 hectáreas para la manzana.
“En principio desde lo formal, recibimos en Mendoza la auditoría de Brasil y todo transcurrió tal como lo esperábamos. Por supuesto que son profesionales en su tema y no dejaron traslucir nada sobre su posible evaluación o resultado. No obstante, podemos decir que las fincas que se visitaron y los empaques cumplían con todas las normas requeridas por SMR” dijo, a Los Andes, el director regional del Senasa, Carlos Lehmacher.
El funcionario admitió que desde el Senasa se percibe un aumento en la presión de la plaga, propiciada tanto por factores climáticos como financieros.
“Nuevamente el año pasado tuvimos factores climáticos, con un invierno corto y con pocos días de temperaturas bajas, que propiciaron que el ciclo de plaga se mantuviera en funcionamiento. Si a esto sumamos que por problemas financieros los productores dejan de hacer las curaciones correspondientes, tenemos este escenario. No obstante, estamos trabajando para solucionarlo», sostuvo Lehmacher.
Sin cosechar
Productores de la zona del Valle del Uco dejaron sin cosechar tanto peras como manzanas durante enero y febrero.
El Instituto de Desarrollo Rural pronosticó para la provincia una cosecha que rondaría para la pera los 65 millones de kilos y estimó 88 millones de kilos para la manzana.
Datos de la Aspeff muestran que entre estas dos frutas sólo entraron a industria alrededor de 50 millones de kilos.
“Por los bajos precios este año muchos productores decidieron no cosechar, principalmente en el Valle del Uco. Hoy estimamos que la cosecha total está alrededor de los 50 millones de kilos”, señaló Riveira.
En tanto, Alberto Carleti, indicó que “muchos productores decidieron no cosechar porque los números no les cerraban”.
Fuente: Los Andes