COSTOS
Este año caería la superficie sembrada de trigo y cebada
Si el área argentina de trigo y cebada fuese este año un 10% menor a la del año anterior –escenario optimista– se requerirían unos 1500 millones de dólares para financiar la siembra de ambos cultivos.
La estimación, realizada por Julio Calzada (director de Informaciones y Estudios Económicos de la Bolsa de Comercio de Rosario) y Sofía Corina (agrónoma del GEA-BCR), constituye la mayor inversión privada por realizarse en el primer semestre de 2015.
La mayor parte del costo de implantación de trigo y cebaba está integrado con insumos dolarizados, algunos de los cuales, como por ejemplo el fosfato monoamónico (MAP), son 100% importados.
En el presente año eliminar las retenciones y los cupos de exportación en ambos cultivos habría promovido una recuperación económica en muchas comunidades agropecuarias, además de la posibilidad de incrementar el ingreso de divisas en diciembre próximo y asegurar la recuperación del mercado brasileño.
Pero ni las autoridades del gobierno nacional ni el candidato presidencial oficialista –Daniel Scioli– se pronunciaron al respecto. La cuestión es que incentivar la siembra de ambos cultivos hubiese representado una amenaza contra el “cepo cambiario” implementado por el ministro de Economía Axel Kicillof para restringir el uso interno de divisas.
La mayor parte de las inversiones que se anuncian casi diariamente por canales de comunicación oficialistas –a diferencia de la siembra de los cultivos de invierno– no son genuinas, sino forzadas ante la restricción (informal) que tienen las empresas para girar divisas al exterior (política que forma parte del “cepo cambiario”).
En los años 2012, 2013 y 2014, según datos del BCRA, las divisas giradas al exterior por el sector privado fueron apenas 2913 millones de dólares, cuando en 2011 (año en el cual aún había libertad para disponer de los recursos propios) esa suma fue de 4495 millones de dólares.