Industria láctea: sólo 10 tambos de baja producción

industria lácteaLos números locales indican que se extraen aproximadamente cincuenta mil litros mensuales, pero la mayoría de ellos son producidos en dos escuelas agrotécnicas. La falta de una planta de elaboración hace que su comercialización sea informal o se elaboren quesos y dulce de leche.

Si tenemos en cuenta que San Rafael es uno de los departamentos con mayor desarrollo ganadero de la provincia, es llamativo que la producción lechera local esté principalmente impulsada por dos colegios, y tan sólo haya unos 10 tambos pequeños distribuidos en todo el territorio. En total, se producen unos 1600 litros de leche, que representan mensualmente casi 50 mil litros. Representantes del rubro mencionan que tenemos cualidades para mejorar esta producción pero falta mayor asociativismo y una planta industrializadora.

Una de las técnicas de la Dirección de Ganadería, Luisa Tapia, explicó: “Hay unos 10 tambos chiquitos dispersos de productores particulares. Es muy poquito lo que se produce, casi todos los tambos tienen entre 4 y 5 vacas. En volúmenes por día esos tambitos deben producir todos apenas unos 1000 litros. Algunos los trabajan para consumo propio y otros lo comercializan como leche cruda, pero no hay una planta que industrialice”.

Por otro lado, aseguró que están trabajando para evitar el comercio informal de leche cruda, ya que está prohibida su venta directa al público por las enfermedades que puede causar al no estar correctamente pasteurizada. “Por las enfermedades está prohibido por el código alimentario argentino. El productor ordeña sus vacas y sale a venderla, y la gente igualmente la compra. Actualmente la están vendiendo a unos 6 o 7 pesos el litro de leche cruda”.

El único tambo que tiene mayor desarrollo técnico y más produce pertenece a la escuela agrotécnica Martín Güemes, de La Llave, con unos 450 litros diarios. Se creó con el objeto de enseñar a los chicos las distintas etapas de la producción, en tanto que todo lo producido lo destinan a la elaboración de cuatro variedades de quesos y dulce de leche que venden en San Rafael y en la zona de La Llave. El director, Pedro Moya, comentó: “Toda la estructura de la escuela tiene unas 336 hectáreas. Tenemos entre 20 y 26 vacas de ordeñe y asisten 210 alumnos”. Con respecto al fraccionamiento comentó: “Mantener la cadena de frío para la leche es más complicado. Trabajarla así tiene menos riesgo de contaminación, ya que si no se enfría bien la leche se corta, además necesitas un transporte para llevarla a los centros donde comercializamos los quesos”.

Uno de los docentes de la escuela, Raúl Besa, comentó: “En un tiempo trabajamos con los productores locales para que nos trajeran la leche cruda y la elaborábamos en nuestro tambo para venderla”. A los productores les daban las vacas y ellos tenían que ordeñarlas, se llevaban una parte de la comercialización. Pero con el tiempo dejaron de traer la leche porque no les convenía ya que el precio se fue quedando.

A este tambo, se sumó hace poco uno más pequeño, el de la escuela Francisco García de Las Malvinas. El director, Juan Carlos Ripa, comentó: “Lo nuestro es reciente, tenemos muy poquitas vacas, 7 de ordeñe. Se elaboran quesos, ricota y también haremos dulce de leche”. Hay que destacar que en esta institución se le enseña a 238 alumnos y según mencionó el director, “se producen 150 litros por día”.

Cuando preguntamos qué hace falta para que San Rafael produzca leche fraccionada en mayor cantidad, desde la escuela Francisco García Ripa explicó: “No están las condiciones para fraccionar leche, si tuviéramos un pasteurizador sí se podría”. Por otro lado, Besa agregó: “La escuela Güemes se instaló por un estudio que determinó que esa zona tenía todas las cualidades para la producción lechera, en La Llave y Monte Comán, pero falta desarrollo y asociativismo para que los productores se incentiven a trabajar la leche”.

Fuente: diariosanrafael.com.ar