Lácteos argentinos vs costos logísticos: así fue el regreso a una de las ferias más grandes del mundo

Las empresas lácteas de Argentina viajaron hasta Alemania; una nueva alternativa de comercialización y la gran amenaza para los productos locales

Lentamente a nivel global se van recuperando actividades y la pandemia demostró la importancia del contacto interpersonal. Un ejemplo de esto se pudo palpar durante la última semana con el desarrollo de Anuga 2021, una de las dos ferias de alimentación más grandes del mundo.

Alternándose con la Sial de Paris, donde el año próximo también habrá representación de las industrias lácteas argentinas, este año en la ciudad alemana de Colonia se volvieron a encontrar vendedores y compradores de todo tipo de productos, agrupados por pabellones con empresarios decididos a encarar negocios.

Lácteas argentinas en Anuga 2021

“Fue muy dificil la decisión sobre cómo organizar el viaje, por las exigencias sobre las vacunas, las cuarentenas, pero sabíamos que necesitábamos volver a este tipo de ferias, porque hacía dos años que no salíamos a hacer negocios y la verdad es que volver fue un desafío que superamos”, le contó a Agrofy News, Santiago Aguirre, el director comercial de Pampa Cheese, una de las empresas presentes, en el stand argentino.

Como parte de la plataforma de exportación Comex, de la Asociación de Pequeñas y Medianas Empresas Lácteas (Apymel), con el apoyo de la Agencia de Inversiones, de la Dirección Nacional de Lechería y de la Cancillería, estuvieron también representadas Remotti, La Cristina, Adecoagro y Lactear, generando así una continuidad de una década en la exhibición y comercio puntual de productos lácteos argentinos.

Con demanda focalizada en África, Asia y también Sudamérica, la feria confirmó la importancia de poder estar en un lugar para tener vínculos múltiples con quienes buscan productos específicos. Tener presencia en estos encuentros permite sostener la confianza respecto a los clientes y también sostiene la seriedad de los negocios que se puedan hacer.

“Más allá de nuestros vaivenes internos hoy nos estamos enfrentando a un gran problema que es el costo logístico de los fletes internacionales, se triplicaron los costos en un año haciendo casi prohibitiva la comercialización al exterior. Por más que seamos muy competitivos, los costos de logística que a veces llegan a los 500 dólares por tonelada nos pueden dejar afuera de las posibilidades de mercado”, explica Aguirres sobre el contexto global donde la falta de contenedores y la concentración hacia China, junto con los costos en alza luego de la pandemia afectan a este y otros sectores

Es por eso que nuestro país debería mejorar las condiciones de las empresas frente a estos imponderables de influencia externa, pero eso requeriría atender a cuestiones impositivas y condiciones más amigables para la exportación.

Leche: oferta celeste y blanca

Argentina ofreció leche en polvo, suero, manteca, quesos semi duros y duros. En tanto, al analizar la oferta internacional se destaca la variedad de quesos de Europa como consecuencia de la experiencia e inversión en maquinaria, pero además de las especialidades resaltan las presentaciones: porciones individuales, con envoltorios delicados y adecuados a cada producto.

“Nosotros todavía estamos lejos de eso, necesitamos seguir invirtiendo en maquinaria y tecnología para lograr la distinción en productos y packaging que es algo que no tenemos”, cuentan los representantes argentinos en Anuga. De todas maneras, sigue siendo la leche entera en polvo lo que más buscan los compradores, al igual que los quesos más masivos de pasta blanda y también semi duros. La demanda también se centra en manteca, sueros desmineralizados y grasa anhídrida. 

Pampa Cheese, la empresa con base en el centro de la provincia de Santa Fe ofreció quesos gouda, muzzarella, edam y queso azul, en bloques y barra. “Si bien las degustaciones no son las mismas, la recepción en esta feria fue excelente, logramos consolidar clientes y seguir proyectándonos a nuevos negocios. A partir de ahora viene el trabajo de enviar muestras, ser prolijos y rápidos en envios y contactos para poder cerrar negocios para el año que viene”, comentó Aguirre.

En el reencuentro con clientes y la potencialidad de nuevos mercados se abrió a Chile, Colombia, Rusia, Líbano y Jordania, sumándose a los vínculos ya tendidos con Taiwan, e incluso China y Vietnam, que son mercados que se abrieron el año anterior a partir de una misión comercial virtual organizada por la provincia de Santa Fe para derivar los productos que se hacen con un proceso diario de 250 mil litros diarios, cinco días de la semana, trabajando desde Progreso con el cien por ciento de la capacidad.

Leche modificada

Por parte de Adecoagro, además de ofrecer leche entera y descremada en polvo, se presentó una interesante alternativa que apunta al mercado africano.

Para salir de los destinos habituales del norte del continente, a través de su representante en la feria, Alejandro Torres, la firma que es la principal productora primaria del país y trabaja firmemente desde 2018 en la industrialización, llegó a Anuga para ofrecer lo que se conoce como “fat filled”, una leche modificada, en seco, que reemplaza a la tradicional leche entera en polvo y que actualmente representa a un negocio de 600 mil toneladas de producto al año y tiende a crecer.

Se cerraron pequeños contratos, se inician las órdenes de prueba y de esta manera se desarrolla un nuevo mercado con múltiples destinos que diversifican las exportaciones lácteas argentinas.

Con retenciones fijas y reintegros a las exportaciones más lentos en nuestro país, el mercado internacional de lácteos debe darle pelea a un efecto inflacionario global que fue marcado en la feria por los principales jugadores en este sector. 

Desde Argentina las palabras abundan al hablar de una buena exportación y grandes expectativas, pero sin dudas la política debe ayudar a crecer, entender que en la región, pero también más allá del continente las posibilidades son muchas y la clave está en el cumplimiento de contratos, en el sostenimiento de condiciones y que los altibajos internos no toquen los acuerdos internacionales, para no perjudicar la palabra de las empresas privadas que hacen su trabajo, en el mercado interno y en cuanto al comercio exterior.

Por Elida Thiery | Agrofy News