Las precipitaciones de las últimas semanas fueron suficientes para disipar los primeros síntomas de déficit hídrico del cultivo. La mayoría de los lotes se encuentra en estado de muy bueno a excelente
La secuencia de precipitaciones que se registraron durante aproximadamente 20 días, revirtieron el período seco y los primeros síntomas de déficit hídrico de los maizales, y además generaron escenarios muy favorables para el crecimiento y desarrollo normal de los cultivares sin inconvenientes, informó el Sistema de Estimaciones Agrícolas de la Bolsa de Comercio de Santa Fe.
De esta manera, el período crítico de floración, como así también la etapa reproductiva, comenzó con buena a muy buena disponibilidad de agua útil en los perfiles de los suelos.
Por otra parte, no se detectaron inconvenientes sanitarios por plagas o enfermedades en el cultivo. Sin embargo, continuó la presencia de algunas malezas Sorghum halepense (sorgo de alepo), dado que por la falta de humedad en los perfiles de los suelos no se realizaron en tiempo y forma los controles necesarios, pero los últimos días retomaron su ritmo ante la presencia de humedad.
Trigo
Se logró un grado de avance de la cosecha del orden del 78 %, representando aproximadamente unas 271.830 ha, con un desarrollo intersemanal de 10 puntos.
Los rendimientos del trigo continuaron siendo heterogéneos e irregulares en toda el área y consolidaron su caída, ya enunciada en otros informes.
Por ello, para la campaña 2020, el rendimiento promedio fluctuaría entre 17 y 18 qq/ha, en el centro – norte provincial. Lo que indicaría una disminución de 16 a 17 qq/ha al alcanzado el ciclo anterior, que fue de 34,25 qq/ha.
Las parcelas que aún no se han cosechado, presentaron un importante grado de avance de las malezas, por las precipitaciones ocurridas. Con respecto a dichos lotes, se definiría si se recolectarían o no, pero en tanto, se realizaron nuevas aplicaciones de herbicidas para el control de las mismas, lo que posibilitaría una mejor trilla o para la implantación de otro cultivo.
Girasol
Después de los días inestables, el cultivo de girasol continuó su ciclo normalmente, creciendo y desarrollándose adecuadamente. Siendo su estado general bueno, porque los perfiles de los suelos recargados de humedad, le posibilitaron el desarrollo normal.
Los lotes afectados por el estrés hídrico continuaron con plantas menos desarrolladas, tanto en altura como en la parte reproductiva, presentando capítulos de menor tamaño.
Hasta el momento se observó muy buena sanidad, sin inconvenientes, pero en lotes más avanzados, en estadio de fructificación, continuaron observándose daños por ataques de palomas y de cotorras.
Algodón
El algodón continuó su crecimiento y desarrollo de manera adecuada, con buena humedad en el perfil del suelo. Los lotes afectados por el temporal, que no se recuperarían, cambiarían su destino, pero serían pocos y en lugares puntuales.
En general, el estado de los cultivos fue bueno a muy bueno, con un adecuado stand de plantas.
El grado de avance de la implantación, para toda el área algodonera hasta la fecha fue del 80 %, unas 40.800 ha, en base a una intención de siembra de 51.000 ha, lo que marcó un adelanto intersemanal de 10 puntos.
Continuó el monitoreo de las trampas en los predios destinados a algodón, como así también la prevención del ingreso del picudo a los mismos, realizándose las aplicaciones en los bordes, en caso de necesidad.
Soja
La implantación de la soja tardía logró un grado de avance del 25 %, representando unas 137.500 ha y mantuvo muy buen ritmo de sembradoras en el período, aprovechando la buena disponibilidad de agua útil en los perfiles de los suelos.
Se estimó una intención de siembra de 550.000 ha, con un incremento de la misma del orden del 2 %, en relación a la campaña 2019/2020, que fue de 538.500 ha.
Los primeros lotes implantados, presentaron buena germinación y emergencia, realizándose aplicaciones de herbicidas post-emergente, para el control de las malezas.
Fuente: campolitoral